jueves, 31 de enero de 2013

DAGGA RAMBA CONTRA HABACUC, EL "AMIGO" DE LOS ANIMALES


Tarzan y D.R. vistos por Russ Manning             

En todas las partes de este mundo globalizado cuecen habas, y no debe sorprendernos que los "artistas" contemporáneos de cualquier sitio intenten imitar a los occidentales en su afán de "a ver quien la hace más gorda". Algunos de los "espíritus creativos" emergentes del área iberoamericana compiten por demostrarnos que su capacidad para  hacer el cafre es equiparable (o incluso superior) a la de sus colegas de Londres, Nueva York o Tokio. Hoy nuestro analista de excepción, Dagga Ramba, pasará revista al historial de un desaprensivo que desarrolla sus actividades en algunos países del Caribe, y que se esconde bajo el alias de "Habacuc"



"Camaradas, amado pueblo y gente sensible en general:
  Es lamentable comprobar como cada día aumenta el número de los mastuerzos empeñados en hacerse famosos en la escena del "arte" contemporáneo como sea, por los medios que sean. Buscan la repercusión mediática, como los psicópatas y los terroristas, y están convencidos de que el único camino válido que le queda al "arte" es romper con los tabúes (con los pocos tabúes) que todavía permanecen vigentes en esta podrida sociedad civilizada. Como ahora el sexo en sus infinitas variedades y perversiones ya no escandaliza a casi nadie, y la blasfemia  está muy vista y sólo hay que temer las represalias de los creyentes que llevan turbante ( porque esos sí que no se andan con chiquitas y pueden degollarle a uno por sacrílego), sólo queda por explotar el tabú de la muerte. Y a ser posible, el de la muerte en directo.
Ahí tenemos la obra de Demian Hirst o del Doctor Muerte, y el de tantas otras luminarias que van indicando el camino de alguno todavía más cafre que ellos, y con menos sutileza y "sentido de la ironía". Nos estamos refiriendo al caso concreto de un "artista" costarricense bautizado como Guillermo Vargas, pero que prefiere ser llamado por el apodo de Habacuc, como uno de los profetas del pueblo de Israel.


Ay Habacuc, Habacuc. Jehová te castigará por tu iniquidad.

Como tantos otros "artistas" de su tiempo (el nuestro), el tal Habacuc se dedica a  montar instalaciones, que para el afortunado que no sepa de qué se trata diremos que son una especie de mezcolanza de elementos diversos y con escasa o nula relación entre sí (fotografías desenfocadas, artículos de "todo a cien", pinturas y vídeos mediocres, etc.)... Vamos, algo parecido a un altar de algún culto voodoo o satanista, para lo que nuestro "amigo" caribeño parte con cierta ventaja al estar familiarizados los de aquellas latitudes con esa clase de cosas.
Pero a lo que íbamos. Resulta que este penúltimo profeta del Anticristo se hizo famosillo por una sola de sus instalaciones, presentada en una galería de "arte" de Managua, a la que denominó "Exposición nº 1".
En ella colocó, sujeto con una cadena, a un perro abandonado y famélico que previamente había recogido en la calle, y lo dejó morir de hambre y sed a la vista del público, negándole alimentos y agua, el muy canalla. Para mayor recochineo, esta especie de sádico dejó escrito en el suelo, con alimento de perro, la frase "Eres lo que lees" (supongo que a una distancia a la que el pobre can no podía acceder porque no se lo permitía la cadena).
Otras cosas completaban ese siniestro y macabro altar, como un audio que repetía machaconamente el himno sandinista al revés, fotos y un incensario donde se quemaron 175 piedras de crack y una onza de marihuana (productos que debe de consumir en abundancia el "artista" ese).
Este fue el triste espectáculo que ofreció ese "genio" del crimen  a su público (cómplice también, porque nadie movió una ceja para socorrer al bicho) : la muerte por inanición de una criatura inocente e indefensa. Algo que nos trae a la mente la crueldad con la que procedían los oficiantes de ciertas religiones precolombinas. ¿Qué será lo próximo que se le ocurra al tal Habacuc? ¿Abrir el pecho de alguien del público para comerse su corazón in situ? ¿Desollar a alguna doncella para ponerse su pellejo como chubasquero?
"Natividad", la pobre víctima de un desalmado.
 Puede que el desgraciado can hubiese muerto de todos modos por el hambre, si se le hubiese dejado a su libre albedrío, como pretende ese aprendiz de torturador para justificar su inmundicia, pero eso nunca lo sabremos. Lo que sí intuimos es que hace falta tener el alma muy negra para ser capaz de cometer una villanía semejante y quedarse tan pancho, e incluso ufanarse de estar creando "conciencia social" con su exposición. Es terrible que haya personas que mueran atacadas por rotweillers, pero eso no justifica para nada una brutalidad de este calibre contra un pobre animalito, que a juzgar por las fotos no pasaba de ser un "mil leches" cualquiera, del todo inofensivo.¿Por qué no tuvo redaños el tal Habacuc ese para encadenar y dejar morir de hambre en un zulo al propietario del rotweiller en cuestión, si de veras le movía la indignación por ese asunto? Esto no es una obra de arte, esto es lisa y claramente una cabronada.
Y ahora pregunto ¿Qué castigo podemos administrar a un individuo de semejante calaña, y que guarde proporción con su fechoría?  Esta vez espero que seais vosotros, el pueblo llano, quienes con vuestros votos me deis la respuesta adecuada, para que podamos dictar una sentencia justa y justiciera.
 Que así se escriba y así se cumpla."
                                                         DAGGA RAMBA I, EL VENGADOR CANINO


Para quitarle hierro a este feo asunto y el mal sabor de boca que seguramente os ha dejado, vamos a tomarnos la vida con un poco de humor. Ahí os dejo con un video de "Muchachada Nui" que, aunque lo cuenta todo en clave de coña y con gruesos trazos , encierra verdades como puños con las que no podemos estar más de acuerdo.


   

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